CINEENTENDIDO

«Oh yeah, they have been shooting at us for a while now!»

Dylan «D» Forrester

Dylan «D» es un criminal que está confinado a encierro domiciliario. De pronto, su hermano muere y tendrá que ir al funeral (a pesar de que eso implique meterse en problemas con la policía). Sean era todo lo que «D» no es: honesto, trabajador, cumplidor de la ley… ¿O eso parece?

Hackl es un director que se ha dedicado en la mayoría de las veces al cine de acción y de terror. Para Dangerous se anima con un intento de thriller pero el resultado es sumamente decepcionante. No consigue darle los elementos visuales necesarios para generar la tensión propia del género y termina por parecer más una sátira que una verdadera cinta de suspense. Fue un esfuerzo valiente pero mal llevado a cabo.

La historia tiene un trasfondo interesante: oro robado de los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial; este elemento, por sí solo, podría funcionar como premisa para cualquier película, sin embargo en Dangerous por la forma en la que está escrito el guión termina por quedarse corto. Los díalogos son sumamente pobres, el villano es plano y sin gracia y el héroe / antihéroe no es nada interesante. Insisto, como premisa puede llegar a funcionar pero la verdad es que la ejecución es pésima.

Scott Eastwood por lo general me gusta. Quizá no sea el mejor actor del mundo, pero… llámenme nostálgico… el tipo es idéntico a su padre y él lo sabe. Lo imita cada que puede: una mirada furtiva por ahí, un gesto por allá, una voz más grave por aquí. Realmente disfruto verlo trabajar por eso, pero en Dangerous Eastwood está básicamente de pena. Es doloroso verlo. No sé si sea su peor actuación en lo que lleva de carrera, pero puede serlo. Mención especial se lleva Mel Gibson (que interpreta a un psiquiatra alcohólico) y que trabaja aún peor que Scott. Diría el dicho oh how the mighty have fallen. Durand me agrada como villano pero su personaje está escrito casi que a forma de tablón general y eso no le beneficia.

En el género del suspense, la música es un elemento fundamental. Ayuda a transmitir al espectador la sensación de urgencia (normalmente a través de los sonidos fuertes y estridentes de instrumentos de cuerda) pero Bryanton no consigue ese efecto… Al contrario. Los sonidos están fuera de lugar y cortan el ritmo y la esencia de la película.

La fotografía es de lo menos peor en la película. No me malinterpreten. Es mala, simplemente no tanto como el resto de las cosas. Dobrescu no sabe jugar con la oscuridad y no le saca ventaja a las escenas en exteriores ni bajo tierra que bien podrían haberle dado una mejor presencia a la cinta.

Mi veredicto: No vale la pena verla ni para el rato. Vergonzosas actuaciones, terrible dirección, pésimo guión. Acabar de verla se convirtió en un reto más que en un gusto.

Mi calificación: 2/10

Imagen de portada: https://www.imdb.com/title/tt3876910/mediaviewer/rm1570772737/